La casa Morató, construida en 1924 por el noruego Alejandro Christophersen en la calle Alberdi. La residencia recuerda a un palacio italiano con dos torres, que tienen la particularidad de que una es cuadrada y la otra redonda. La residencia fue equipada a todo lujo con muebles de la casa Jansen de París y mármoles pirenaicos. Tenía grandes estufas pero en invierno sus habitantes pasaban frío porque, según cuenta Caubarrère , la dueña de casa era muy pulcra y no quería que las paredes de la residencia se llenaran de hollín.
Revista de Arquitectura (S.C.A)
Foto y texto extraídos de:
Fotos: A. Machado
La residencia se encuentra frente al majestuoso Hotel y Casino Carrasco, proyecto de los franceses Gastón Mallet y Jacques Dunant, hito arquitectónico de la zona.
Foto extraída de:
http://www.skyscrapercity.com/
1 comentario:
Casona actualmente muy bien conservada y destinada a oficinas muy coquetas.
Uno de los hijos Herderos de D. Ovidio Morató, D. Federico Morató Barreto, era mi padrino, casado con Elsie May Miller Miles, hermana de mi madre, Gladys Miller Miles, mujer de mi padre, Guillermo Juan Christophersen Ibarlucea.
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